A Eli le encanta el chocolate y tampoco se muere por ir a la playa. Eli cuando se enfada es irracional y también pierde las formas. Parece mentira que con su Incestocuerpo pueda ponerse como se pone... (Qué risa cuando le colgó el teléfono a Andrea)
Me gusta Eli porque es muy "buena chica", y aunque Mede se ría y me diga que la expresión es hortera, es verdad.
Porque aunque a veces me desquicie con su impuntualidad, con sus manías, con sus enfados, con sus perfeccionismos, cada vez que la he necesitado, siempre ha estado enlace.
Así que, aunque Eli no lea el blog, le deseo desde aquí, que este sea un año de esos "para recordar", un año sin tantas presiones y sin tantos agobios. Un año un poco más libre, un poco más despreocupado, otro año juntas lleno de momentos inolvidables.
Antes de conocer a Diego (haciendo un pequeño paréntesis con el Chico que odiaba mi risa) (mis dos únicos "novios") mi vida sentimental se limitaba a besar a quien me apeteciese. Besos sin compromiso que no iban más allá de aquella noche, o como mucho de un par de fines de semana. No recuerdo más de un par de personas con las que quedase para tomar algo durante la semana o en cualquier otra situación que no fuese de fiesta.
Por alguna razón que nunca llegué a definir, nunca quise quedar con nadie para tomar algo, ir al cine o cualquier otra cosa que se supone, te apetece hacer con la persona que te has estado besando. Me daba vergüenza pensar en la situación de dos desconocidos sentados frente a una cocacola sin tener nada que decir. A veces, el sexo, es lo menos íntimo entre dos personas...
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